Con la correspondiente señalización vertical y la todavía más llamativa pintura amarilla sobre el asfalto, hemos podido ver cómo se delimitan unas zonas de la avenida F. Villalobos (y su ponemos que sucederá lo mismo en el resto de la ciudad) para  aparcamiento exclusivo de las auto escuelas, un negocio que abunda en el barrio, por la proximidad del Campus Universitario, donde consiguen bastantes de sus clientes.

El horario reservado es, además, enormemente amplio, pues abarca, los días de diario, desde las 7.30 de la mañana a las 12 de la noche, y los sábados, de 7.30 a 15.30. Mucho más que la O.R.A., por poner una comparación.

Sin ánimo de ofender a los responsables de las autoescuelas, nos parece excesivo que se les autorice una zona exclusiva para ellos y, además, con un horario tan amplio.

Si bien es cierto que el vehiculo es su herramienta de trabajo y que necesitan disponer de un lugar para aparcar, seguro que hay otros muchos profesionales que también necesitan sus vehículos para trabajar y, si se atendieran todas las  peticiones, no iba a quedar sitio libre para el resto de los ciudadanos. Si ya resulta difícil encontrar aparcamiento en el barrio durante los días laborables, con estas medidas va a ser cada vez mucho más complicado.