Vecindario nº NN

El estado de conservación del parque «Villar y Macías» es realmente bochornoso. Las fuentes no funcionan, todo presenta un aspecto descuidado y sucio y, además, se está convirtiendo en un lugar al que no se debe ir.

La pérgola construida en el parque presenta un estado no sólo lamentable, sino peligroso para cualquiera que pase por allí. Los tableros se caen, amenazando con hacerlo sobre cualquiera de los peatones que utilizan ese paseo. Continuar leyendo »

Vecindario nº50

No sólo las esculturas nos dan pena, sino también las plantas que flanquean el acceso al I.E.S. «Fray Luis de León». Inaugurado a bombo y platillo por nuestras autoridades, pronto se vio que no había ningún interés en su mantenimiento. Las plantas languidecen, por falta de agua; las papeleras no se vacían en meses, la fuente está sucia, al igual que los bancos. ¿Es que no llegan los servicios de limpieza a esta zona de la ciudad?

Vecindario nº50

El parque «Villar y Macías» necesita una buena reforma, que resuelva las carencias y evite una mayor degradación de esta zona verde de la ciudad.

Además de sustituir la pérgola, que se encuentra sin cubierta en muchos tramos, hay que renovar la zona del auditorio, donde bastantes planchas están rotas o han desaparecido.

Sería bueno también que se plantaran más árboles, para dar sombra y permitir que los vecinos puedan disfrutar del parque en el buen tiempo, pues la situación actual hace que sólo cuando baja el sol se pueda sentar la gente en los bancos.

Vecindario nº53

En el mes de Septiembre se inauguraba el parque geobotánica situado junto al río Tormes. Aunque hasta ahora las sombras de los árboles brillan por su ausencia, es de esperar que en pocos años se convierta de verdad en un parque para disfrute de todos los ciudadanos. Seguimos empeñándonos en mucho diseño, mucho paseo y dejamos a un lado lo fundamental de un jardín, que tiene que dar sombra, pues el clima en Salamanca no perdona y el sol nos machaca en verano.

Sin embargo, un gran peligro se cierne sobre este parque: una avenida que pretende unir el Paseo de San Vicente con el Puente de la Universidad. Nos resulta increíble, inexplicable, que hagamos un parque aprovechando la ribera del río (una gran idea) y ya estemos pensando en destrozarlo para construir una avenida que va a discurrir por todo lo largo del parque. ¿Alguien nos lo puede explicar?

Vecindario nº48

El estado de conservación de las aceras del Puente de la Universidad es realmente indecente. A pesar del poco tiempo que lleva construido, pasear por las aceras es un auténtico suplicio, pues las placas bailan, están levantadas, se tropieza uno con la siguiente, que sobresale bastante más de lo debido o simplemente se ve un desgaste injustificable.

Vecindario nº48

La Avenida Champagnat ha visto cómo se renovaba el tendido eléctrico y las farolas, con el fin de cambiar la iluminación de la calle, que presentaba un estado bastante lamentable. Esta actuación estaba ya anunciada hace tiempo, pero, como suele ocurrir, tarda bastante en convertirse en realidad.

Lo que necesita el Barrio ahora es que se vaya renovando el resto de calles que tienen una iluminación deficiente, sobre todo las situadas entre Filiberto Villalobos y Champagnat, aunque tampoco se debe olvidar otras como Nueva de San Bernardo o Plaza de las Cigüeñas, que son auténticas bocas del lobo y dan miedo en cuanto cae la noche.

Vecindario nº49

La calle La Tórtola, entre Volta y Huerta Otea, siempre fue una calle cortada al tráfico, con árboles y una zona de tierra que podría convertirse algún día en jardín.

Aunque sufrió siempre el castigo de los perros, que eran llevados allí por sus dueños para hacer sus necesidades, ahora presenta un aspecto tan increíble como el que se aprecia en la fotografía: toda ella está llena de coches, cual aparcamiento en superficie.

De todos es sabido que cada vez cuesta más encontrar aparcamiento en el Barrio, pero eso no justifica el que los coches acaben adueñándose de todo el espacio. De seguir así, pronto veremos los jardines también llenos. Y la Policía Municipal no dice nada ¿Por qué?

Vecindario nº49

Tanto la calle Cantalapiedra como Armuña son calles peatonales, restringidas al tráfico. Estas calles cuentan, a ambos extremos, con unos arcos que evitan el paso de los vehículos. Estos arcos se tuvieron que montar porque ciertos vecinos no respetaban el carácter peatonal de las calles y cruzaban con sus coches de un lado a otro.

Sin embargo, la presencia de estos arcos ocasiona otros problemas. No es posible el acceso de ambulancias o camiones de bomberos en caso de necesidad. Se han dado ambos casos y los problemas han sido grandes. Hay que sacar a los enfermos en camilla o silla de ruedas.

Creemos que se podría estudiar una solución, de tal modo que quedara siempre libre un acceso para estos vehículos. No supone mucho esfuerzo, sino buena voluntad de todos.

Vecindario nº49

Además de la calle San Felices, que presenta un aspecto bastante deplorable, nos comentan los vecinos que las calles Cuarta y Quinta, asfaltadas no hace mucho tiempo, también están sufriendo hundimientos en el firme.

Desconocemos el motivo, aunque no nos sorprende, habida cuenta de la frecuencia con la que ocurren estos hechos.

Vecindario nº50

Con la llegada de las primeras lluvias otoñales nos volvemos a encontrar con la misma situación de siempre. Los charcos que se forman en algunas calles son tan grandes que más parecen piscinas. En especial, la avenida Filiberto Villalobos, tanto en su confluencia con la calle Candelario como con la calle La Alberca. Para los peatones es todo un problema el pasar de un lado a otro sin meter los pies en el charco. ¿Tan difícil resulta arreglar estos puntos?

Donde resulta del todo injustificable la situación es en los jardines de la calle Los Villares. Los sumideros están completamente obstruidos, así que el agua se queda en los jardines y forma una piscina impresionante. Cuando se piden explicaciones, los jardineros dicen que son los barrenderos los encargados de limpiarlo, mientras que los barrenderos dicen justo lo contrario. Nos da lo mismo que sean unos u otros los responsables. Lo que queremos es que se limpien los sumideros, y cuanto antes mejor. Porque se pagan los impuestos para recibir unos servicios. Y es el concejal de Medio Ambiente, Juan José Hernández Araujo, el que tiene que resolver el problema.